Microbiota, memoria y comportamiento: ¿puede tu intestino influir en tu cerebro?

El eje microbiota-intestino-cerebro: una conexión vital para la mente

En los últimos años, la ciencia confirmó algo que muchas tradiciones intuían: lo que pasa en el intestino repercute directamente en el cerebro. Esta comunicación bidireccional, conocida como eje microbiota-intestino-cerebro, es clave en el desarrollo y funcionamiento del sistema nervioso central (SNC) y puede afectar procesos tan complejos como el aprendizaje, la memoria, la toma de decisiones y el estado de ánimo.

Este eje opera a través de una red compleja de vías neuronales, inmunológicas, metabólicas y hormonales, donde uno de los grandes protagonistas es la microbiota intestinal.

🧠 ¿Qué es la cognición y por qué puede alterarse?

La cognición abarca funciones mentales como la comprensión, el pensamiento, la memoria, la percepción y la resolución de problemas. Cuando alguna de estas funciones falla, hablamos de disfunción cognitiva. Puede manifestarse como dificultad para concentrarse, pérdida de memoria, lentitud mental o cambios en el comportamiento.

Cada vez más estudios muestran que las alteraciones en la composición de la microbiota intestinal (disbiosis) pueden estar involucradas en estos síntomas.

🔎 Microbiota, estrés y cortisol: un triángulo que influye en tu mente

Uno de los principales reguladores del eje microbiota-cerebro es el eje hipotálamo-hipofisario-adrenal (HPA). Este sistema hormonal regula la producción de cortisol, la hormona del estrés. Si bien el cortisol es necesario en niveles adecuados, su exceso sostenido (como en el estrés crónico) puede dañar tanto el intestino como el cerebro.

Cuando el eje HPA se desregula:

• ⚠️ Aumenta la permeabilidad intestinal (síndrome de intestino permeable)
• ⚠️ Se modifica la diversidad microbiana
• ⚠️ Se inflama el intestino… y también el cerebro.

El resultado: peor memoria, menor capacidad de concentración, irritabilidad y alteraciones en el comportamiento.

👵 El envejecimiento también afecta a la microbiota (y al cerebro)

Con el paso del tiempo, no solo envejece el cuerpo, también lo hace la microbiota intestinal. En personas mayores se observa:

• 🔸Menor cantidad de microorganismos benéficos
• 🔸Mayor variabilidad entre individuos
• 🔸Mayor permeabilidad intestinal e inflamación

Esto se traduce en una mayor vulnerabilidad cognitiva, incluso en ausencia de enfermedades neurológicas diagnosticadas. Por eso, preservar la diversidad y funcionalidad de la microbiota es clave para un envejecimiento cerebral saludable.

✨ ¿Sabías que tu microbiota produce neurotransmisores?

Los microbios intestinales no solo ayudan a digerir los alimentos. También producen y regulan neurotransmisores, las moléculas que usan las neuronas para comunicarse. Algunos ejemplos:

• ➡ GABA: el neurotransmisor de la calma.
• ➡ Serotonina: regula el estado de ánimo y el sueño.
• ➡ Dopamina y noradrenalina: clave para la motivación y la atención.
• ➡ Acetilcolina: esencial para el aprendizaje y la memoria.

Aunque la mayoría no atraviesa directamente la barrera hematoencefálica, sí influyen en el sistema nervioso a través del nervio vago, actuando de forma indirecta sobre el cerebro.

Tryptófano, serotonina y neuroinflamación

El triptófano es un aminoácido esencial que la microbiota puede transformar en serotonina. Pero en contextos de inflamación y disbiosis, el triptófano se desvía hacia la producción de moléculas tóxicas para el cerebro, lo que aumenta el riesgo de trastornos como la depresión o la disfunción cognitiva.

Metabolitos clave para tu salud cerebral

Además de neurotransmisores, la microbiota genera compuestos bioactivos esenciales para proteger el cerebro:

• ➡ Ácidos grasos de cadena corta (AGCC): como el butirato, con efecto antiinflamatorio. Ayudan a regular el eje HPA y disminuyen la activación simpática.
• ➡ Ácidos biliares: modificados por la microbiota. Su alteración se ha asociado con deterioro cognitivo y enfermedad de Alzheimer.

💉 Medicación, microbiota y cerebro

Muchos medicamentos comunes (antibióticos, inhibidores de la bomba de protones) pueden alterar la microbiota intestinal. Si no se acompañan con estrategias que cuiden los microorganismos beneficiosos, pueden favorecer disbiosis y generar efectos negativos sobre la memoria, el ánimo y la función ejecutiva.

Entonces, ¿cómo cuidar tu microbiota para proteger tu cerebro?

✔️Alimentación personalizada y rica en fibra prebiótica

✔️ Probióticos específicos para favorecer la producción de neurotransmisores

✔️ Manejo del estrés, para regular el eje HPA

✔️ Evitar el uso innecesario de fármacos que alteran la flora intestinal

✔️ Enfoque integral y personalizado, adaptado a tu edad, síntomas y estilo de vida

Si sentís que tu memoria falla, que el estrés te supera o que tu ánimo se desestabiliza, tal vez tu microbiota te esté pidiendo ayuda.

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Bibliografia:

1. Señalización cognitiva: la microbiota intestinal y el eje hipotálamo-hipofisario-adrenal Frontier Endocrinol (Lausana)19 de junio de 2023; 14: 1130689
2. Regulación de los neurotransmisores por la microbiota intestinal y efectos sobre la cognición en trastornos neurológicos Nutrientes. 19 de junio de 2021;13(6):2099